Tren «El Económico»

Hacia fin del siglo XIX llega a Santa Ana el Ferrocarril Económico, Agregando un nuevo medio de servicio. Fue el único Ferrocarril que se construyo con Capitales Privados.

Lo trajo Francisco Bolla, Italiano que llega a Corrientes en el Año 1.850.
Se concreta la instalación de esta Obra Cuando, Se Sanciona el 18 de Diciembre de1.890 la ley de Concesión que se había solicitado para el establecimiento de una Vía Férrea que conectaría Nuestra Ciudad con San Luís del Palmar.
Tuvo un recorrido total de 178 Km. y constaba de dos Ramales Principales:
1º El que unía Lomas de Vallejos con la Localidad de General Paz con un recorrido de 31 Km.

2º Comprendida el Ingenio 1º Correntino hasta la Localidad de San Cosme con un recorrido de 13Km. Fueron las Maquinas Locomotoras que Prestaron Servicio:
La primera, denominada “Roque”, con Dos Ejes Acoplados de 25 hp llamado por los lugareños “El Buey de Hierro”.

La segunda, similar llamada “Carlitos”, de 10hp. Con un tanden para trocha de 60cm. Y Caldera para Quemar Leña.

La tercera, de nombre “Panchito”, de 75hp. Y de Doble Expansión asentada sobre un track del peso de 9 toneladas vacías y 12 toneladas en marcha.

El primer tramo entre Ingenio y San Luís del Palmar se inauguro el 24 de Agosto de 1.898 culminándose de esta forma La totalidad de la Obra Ferroviaria que comprendía 72 Km. Lo que se destaca de estas Locomotoras es que fue el Primer Medio de Transporte Terrestre de Cargas y Pasajeros que integro al Interior de la Provincia con la Capital.

El señor azucarero, Francisco Bolla necesitaba que su Ingenio en Santa Ana tuviera conexión directa y barata con Corrientes, de ese modo obtiene permiso de la Provincia para la construcción de un ramal desde San Luis a la Capital en 1890. Se trataba de un tren de sesenta centímetros de trocha, más tarde bautizado como «El Económico».

En 1892 se finaliza el primer tramo a cargo del Ingeniero Coll y dos año después se completa el recorrido de manera fluida con extensiones por los principales campos de azúcar desde San Cosme, hasta Paso de la Patria.

La empresa de Bolla quiebra y la Provincia busca darle continuidad a la construcción de durmientes y rieles desde el norte hacia el mediterráneo correntino.

Así logra la concesión la firma Dodero y con luz verde para ampliar el tendido de vías con llegada a Nuestra Señora del Rosario de Caa Catí y San Antonio de Mburucuyá, el Ingeniero Mauro HerlizKa diseña y supervisa ese proyecto. La obra comienza a gestarse en 1909 y para 1911 llega Caa Catí. El ramal Lomas de Vallejos-San Antonio de Mburucuyá demora al menos otros cuatro años.

El emprendimiento de Dodero también fracasa y tras hacerse acreedor el Banco Francés, la Provincia toma el control del recorrido en cada ramal para 1927.

Con la nacionalización del ferrocarril en 1948, el «Económico» y su más de 200 kilómetros de vías pasó a manos del Ferrocarril General Urquiza.

Con el gobierno de facto de Onganía se decidió el cerramiento de muchos ramales y las locomotoras que daban pérdida. Fue el preludio de lo acontecido en 1989 bajo el gobierno democrático de Menem que profundizó el levantamiento de líneas férreas. Los vagones de carga se oxidaron en los andenes o se vendieron como chatarras.

El trencito dejó de operar y realizó su último viaje en 1969, era un 29 de octubre. Se dejó de cortar boletos, unos $12 pesos costaba viajar en primera clase y $8 en segunda. Desde Mburucuyá a Corrientes tenía un recorrido de 178 Km y con mucha paciencia en 23 horas se llega a destino, salía de la estación Libertad a las 5:30 a/m, eso sí en punto.

«El 9 de febrero de 1966 la locomotora 682 del ramal 060, Ferrocarril Urquiza, salió a las 9 de la mañana de la capital correntina arrastrando seis vagones de pasajeros y cuatro de carga y correspondencia.

Su destino era Mburucuyá, a 178 kilómetros de distancia. Llegó el día siguiente a las 10.47 de la mañana, empleando veinticinco horas cuarenta y siete minutos, con un promedio algo inferior a siete kilómetros la hora.

No es un caso excepcional, sino apenas reciente, en la historia del tren más chico, más lento, más exasperante y más divertido del mundo». Rodolfo Walsh en su crónica -El Expreso de la Siesta- publicado en «El Violento Oficio de Escribir».

Hoy sin sus vías, las tres locomotoras originales se encuentran, dos en Santa Ana de los Guácaras y la otra en Mburucuyá.

Debemos recordar que el beneficio económico nunca debe ser superior al social, pues recorridos como el del Económico le dio desarrollo productivo a pueblos en el mediterráneo correntino.

Recitado «El Tren Ausente» por el Sr. Olivieri (12 de Octubre de 2014)

El último viaje

Archivo general del Nación – 1969. Documento Fílmico. Tambor 1242.C16.1.A.